Residencia de alta gama con créditos y financiamiento incluidos
El crédito como motor de la economía, sostiene la esperanza de llegar a los inversores o dueños, en Argentina el problema de la vivienda es antiguo y las tendencias en construcción parecen ir en una dirección en cuanto a calidad que no se condice con el bolsillo común.
La infraestructura de la ciudad, sobrepasada desde hace raro no sólo por el abigarrado uso del espacio, sino por el transporte, la polución, el ruido y de la mano de las nuevas tecnologías, con un cambio de tendencias en el espacio de trabajo, impulsa un nuevos sistema de residencias, el trabajo lejos del ruido, en casa, lo más posible y por lo tanto hay una tendencia a convertís la casa en un solar vacacional que combina con el nuevo estilo de vida de los argentinos.
La vida en Countries es una tendencia que viene desde que se pesificó la economía y se mantiene hasta hoy, cuando se recogen sus frutos.
Inmobiliarias desarrolladoras se permitieron pasar los años difíciles invirtiendo de cara a las nuevas tendencias, adelantándose a una demanda que ya mostraba su perfil en el resto del mundo.
Comodidades de hotel, espacios de trabajo, relaciones entre espacios de trabajos con igual actividad entre vecinos.
La falta de créditos hipotecarios se sostuvo con financiamiento de las inmobiliarias, y a su vez con un modelo de inversión que permite adquirir porcientos de la inversión, acercándose de este modo a las disponibilidades del inversor.
Las demandas del sistema de hipotecas a largo plazo, no lograron alcanzar un nivel de operaciones interesantes para el negocio inmobiliario por lo que algunas comenzaron a generar sus propios proyectos, no sólo con la construcción, sino con propuestas con créditos hipotecarios en dólares, que a su vez permitía un acceso inmediato a la inversión.
La línea disponible para el inversor, en forma privada, resultaron una desahogo para una economía que no ofrece más que cláusulas bancarias poco flexibles, cuyas condiciones de préstamos, a plazos poco concretos o mayormente con una variación poco confiable en tiempos actuales.
Establecer cuotas más al alcance del bolsillo común depende del largo plazo, una combinación poco confiable en un país donde las reglas económicas de no son claras o por o menos poco estables, lo que impacta sobre la oferta a la venta de propiedades, que en muchos casos se convierten en la suba de ofertas para alquiler.
Las expectativas de financiamiento bancario sobre de aproximadamente el 75 por ciento del valor de inmueble, mientras que los créditos u hipotecas en inmobiliarias cubrirían el valor total con reglas flexibles de financiamiento.
El coeficiente de actualización en la inflación es un valor que no logra estabilizarse ni tener un vocero único, pero en la realidad cotidiana la inflación supera el salario, de manera que el financiamiento en sólo un porcentaje hace inviable el acceso a una propiedad sin el apoyo de financiamiento extra.
Desde que asumió la nueva administración que se enuncian línea de crédito hipotecario, pero en la realidad del mercado, las operatorias privadas mandan, son inmediatas y sobre todo aprovechan el actual parque de inmuebles a estrenar, sobre todo en zonas de novedad como en los countries de zona sur, ya preparados para las tendencias y nuevos hábitos de consumidores, rodeados de verde, campos deportivos y con todas las comodidades de un hotel, todo esto ya mismo, sin necesidad de estar esperando que los anuncios se concreten, ya hace más de 2 años que son un enunciado.
Cartón resistente, una idea de un diseñador chino que promete ingresar en el mercado de decoración de interiores, industria del mueble y otras opciones.
La burbuja inmobiliaria provoca efectos secundarios, cualquiera con una propiedad arma un sitio para atendión turística sin tener la menor idea de cómo se lleva adelante un servicio de hotel.